Giro d'Italia

Basso reina en el Zoncolan

DAVID ARROYO MANTUVO LA MAGLIA ROSA TRAS REALIZAR UN ENORME ESFUERZO EN LA ÚLTIMA SUBIDA

El líder del Liquigas sacó tiempo a todos sus rivales después de realizar una excelente subida a la 'pared' del Giro · Sastre terminó sexto a 2:43 del italiano y más tarde llega Arroyo, que dio todo para volver a vestir la maglia rosa · Tondo, el más perjudicado, llegó a más de 25 minutos de Basso

Ivan Basso dio un enorme golpe de autoridad en el Giro al imponerse en la etapa reina de la carrera con final en alto en el Monte Zoncolan, la 'pared' de la ronda italiana. El italiano del Liquigas llegó en solitario y sacó tiempo a todos sus rivales para revolucionar una general que sigue comandada por el toledano David Arroyo.

El Giro de Italia llegó a la gran montaña y lo hizo con la etapa reina y la subida al Monte Zoncolan, considerado por muchos italianos como la subida más dura del mundo. Sea como fuere, lo cierto es que la última ascensión del día nos deparó un bonito espectáculo donde se vio al mejor Basso y, en cuanto a los españoles, se vio al Sastre más inteligente y al David Arroyo más 'peleón'

La jornada iba claramente de menos a más. Con inicio en Mestre, al norte de Italia, los corredores debían superar 218 kilómetros entre los que se encontraban tres puertos y el plato fuerte del día, el Zoncolan. Los protagonistas de gran parte del día fueron seis hombres que marcharon fugados hasta que el terreno les comió las piernas.

La escapada del día
Los fugados eran Ludovic Turpin (Ag2R), Jackson Rodríguez (Androni Giacatolli), Nico Sijmens (Cofidis), Guillaume Le Floch (BBox), Jerome Pineau (QuickStep) y Francesco Reda (Quick Step), que marchanban escapados desde el kilómetro 40 y cuya diferencia llegó a ser de más de 13 minutos.

Pero el trabajo del Liquigas el día de hoy fue para quitarse el sombrero. Dominando en todo momento el pelotón y la escapada, el conjunto de Ivan Basso controló en siempre los tiempos y supo estirar el grueso hasta que se partió en el momento más decisivo.

Después de pasar por el primer puerto del día, el de Sella Chianzutan, de segunda categoría, los escapados veían poco a poco reducida su diferencia. En la subida del segundo puerto, el de Passo Duron, de primera categoría, Reda se quedaba atrás y las esperanzas de la fuga comenzaban a esfumarse. Ya en ese puerto, el Liquigas tiraba tan fuerte que algunos corredores ya cedían algo de terreno, no así los favoritos.

El plato fuerte del día
Después llegaba Sella Valcalda, la tercera subida de día, de segunda categoría, y que terminaría por reventar a los fugados, que todavía mantenían su aventura. Pero todo esto no fue más que un 'aperitivo', unos entremeses para el gran plato fuerte que a más de uno se le atragantó y donde Basso puso la guinda a semejante pastel.

Era la tercera vez que el Giro visitaba el Monte Zoncolan (las dos anteriores fueron en 2003 y 2007 y en ambas la victoria fue para Gilberto Simoni). Con una longitud de unos 10 kilómetros, en la subida se subieron 1.200 metros de desnivel con una pendiente media del 11,9% y rampas de hasta el 22%. Lo dicho, la 'pared' del Giro.

Es ahí cuando el grupo de escapados fue cayendo poco a poco y era el momento de los 'gallitos' de un reducido pelotón. Completado el sensacional trabajo del Liquigas, era la hora de que los hombres importantes jugaran sus cartas. El primero en mostrarlas fue Scarponi. El 'zapatero' se puso a tirar con fuerza y dejó atrás a todos salvo a Basso y Evans, los más atentos.

Scarponi comandó el desenlace
El tirón del italiano fue aprovechado por sus dos compañeros, que más tarde le dejaban atrás. Y así se iba completando una subida donde detrás marchaban Vinokourov, Nibali y Cunego, más atrás David Arroyo y más atrás todavía Sastre. El abulense puso el ritmo de crucero y comenzaba así su particular ascensión.

Mientras tanto, la fuerza de Basso dejaba atrás a Evans y así se llegó a lo alto de la subida. El italiano se coronaba en todo lo alto después de la tremenda paliza y la exhibición mostradas y después lo hacía Evans, que también dio un importante paso en sus aspiraciones por hacerse con la maglia en la semana decisiva.

Por detrás llegaba un excelente Scarponi y más atrás Cunego seguido de Vinokourov. Y después lo hacía el siempre inteligente Sastre, que logró superar a Nibali en la subida y se colocaba cuarto en la general. Y todavía faltaba David Arroyo, que se dejó la piel en el Zoncolan pero que mantuvo la maglia rosa en un día muy importante para él. Al toledano y al resto de corredores les espera una jornada de descanso para reponer fuerzas de cara a la última y decisiva semana de un Giro que está siendo tan espectacular como apasionante.

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