Rafael Valls sigue líder en Cantabria en el Circuito Montañés
El corredor cántabro David Gutiérrez,
del Camargo Ferroatlántica, se ha impuesto al sprint en la quinta
etapa del Circuito Montañés, Polanco-Torrelavega (173,3 km), en la
que Rafael Valls (Burgos Monumental) ha mantenido el maillot
amarillo que se enfundó en la etapa reina de ayer.
Gutiérrez fue el más fuerte en los últimos metros en los que tuvo
que luchar junto a su compañero de equipo, Vicente Grau, Thomas
Rabou (Rabobank) y William Aranzazo (Boyaca es para vivirla).
La quinta etapa empezó con el cielo amenazando lluvia y hubo
relativa calma para afrontar una larga ascensión (41 kilómetros) al
puerto de Palombera (primar categoría).
Una vez coronado el puerto, el cuarteto que ha luchado por la
victoria final abrió una brecha considerable con respecto al grueso
del pelotón.
Precisamente, tras el descenso de Palombera y cuando la carrera
se dirigía hacia la ascensión de Castillo Pedroso, un tramo de casi
cinco kilómetros de subida de segunda categoría, se produjo un hecho
inédito en la historia del Circuito Montañés.
Los escapados atravesaron un paso a nivel que se cerró tras ellos
y cuando llegó el pelotón tuvo que parar durante cinco minutos, lo
que aumentó la ventaja de los fugados a diez minutos.
Hasta los últimos cuatro kilómetros de carrera, la primera
posición la ocupaba Vicente Grau en compañía del trío que lo ha
acompañado durante toda la jornada.
En ese punto empezó una dura competición por la primera plaza en
la meta y Vicente Grau perdió la cabeza de carrera a tan sólo dos
kilómetros de la meta. En el sprint final David Gutiérrez entró por
delante de Rabou, Aranzazo y Grau, por ese orden.
Mañana se correrá la sexta y penúltima etapa, Torrelavega-Santo
Toribio (147,1 km), en la que previsiblemente se decidirá el ganar
del Circuito Montañés, ya que los ciclistas deberán superar dos
puertos de primera, Collada Carmona y Collado de Hoz, y tres de
segunda, con meta en la cima del último de éstos, Santo Toribio.
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