Purito: Sueño con ganar la Lieja-Bastogne-Lieja

Photo: courtesy
Wim Dingemanse

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JOAQUÍN RODRÍGUEZ YA SABE QUÉ VA A PEDIR A LOS REYES MAGOS

Recién llegado de la concentración del Katusha en Italia, Joaquín Rodríguez pasa las Navidades en Andorra, donde disfruta de la familia sin descuidar su preparación antes de embarcarse en la nueva temporada.

Pregunta. El Katusha, su equipo, se ha reforzado mucho para 2012. ¿Le molesta tener que compartir galones?
Respuesta. En absoluto. Un equipo como el nuestro, con un presupuesto tan alto, carecía de líderes para algunas carreras. Había pruebas en las que no teníamos a nadie para torear. Con Menchov y Freire, sin embargo, tendremos opciones en todo tipo de escenarios, incluso cuando doblemos calendario. Mi programa apenas sufre alteraciones, seguiré con las clásicas, el Giro y la Vuelta como objetivos, además del Mundial, que en 2012 vuelve a ser duro.

P. El Tour será cosa de Menchov y así la responsabilidad estará compartida, ¿no?.
R. Malo sería que me relajase, porque a mí me gusta la presión. Además, los fichajes no me afectan mada y, por el contrario, el equipo es mucho más competitivo que antes. No era lógico que una estructura como la nuestra tuviera problemas para estar entre las 14 ó 16 mejores del mundo. Y tampoco era lógico que no estuviera en ella el mejor ciclista ruso para vueltas por etapas.

P. ¿Se entenderá con Denis Menchov?
R. Seguro que sí, porque alguien que es amigo de Zandio tiene que ser buena persona por narices. Además, como ciclistas somos muy diferentes, luego nos podemos compenetrar, y tenemos calendarios distintos.


P. ¿Tiene ya decidido su programa, dónde debutará?
R. Empezaré en Mallorca, tres días para coger el punto. Luego el Tour de Omán, que me gustó mucho el año pasado, y después Tirreno, Volta, País Vasco, Amstel, Flecha, Lieja, Giro y, si acabo bien, Dauphiné.

P. ¿No es demasiado?
R. A mí me gusta correr. Ése es el primer pico de forma, luego viene el segundo, que me motiva muchísimo, y que pasa por la Vuelta, el Mundial y Lombardía.

P. ¿Cuál será su primer objetivo del año?
R. La Tirreno-Adriático, porque creo que vuelve a Montelupone [el muro donde ha ganado en 2008 y 2009] y me puede ir bien. A partir de ahí, todas las pruebas que corra: Volta, País Vasco, clásicas, Giro...

P. Las clásicas se le resisten.
R. Sí, he sido segundo en las tres: Amstel, Flecha y Lieja. Aunque parezca mentira, cuando pasé a profesionales era especialista en pruebas de un día, no en vueltas. Era rapidillo y se me daban bien. Eso aún lo llevo dentro, de ahí que sueñe con ganar la Lieja, que es la que más me gusta. Si pudiera, metería los segundos y terceros puestos en un saco y los cambiaría por un triunfo en Lieja.

P. Y luego el Giro. ¿Irá con intención de ganar?
R. ¿Por qué no? Iré con intención de hacerlo lo mejor posible, porque el recorrido me va muy bien. Después, me sabe mal saltarme el Tour otra vez, pero tiene demasiada CRI para mí, así que prepararé la Vuelta, que además llega al Coll de la Gallina, aquí, en Andorra, y lo conozco bien. La Vuelta me ha dado mucho, pero tengo una espina clavada por las dos caídas que sufrí este año y que me dejaron manso y demasiado lejos en la general [19º].


P. Y, de postre, el Mundial.
R. Discurrirá por el trazado de la Amstel, con varias pasadas por el Cauberg, luego habrá oportunidad de luchar por las medallas.


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